IKEA se inspira en los muebles sencillos y funcionales del diseño danés y en maderas como la teca y la caoba, y empieza a colaborar con algunos de los principales diseñadores escandinavos. Muchos clientes se deshacen de sus pesados muebles heredados, como es el caso de los enormes sofás y aparadores.
El
necesita de una renovación con muebles modernos que combinen la artesanía sueca con las formas aerodinámicas de la era espacial. También es entonces cuando surge la sala de estar, un lugar donde pasar tiempo en familia de manera cotidiana, y donde el nuevo televisor preside el espacio.